30/8/08

Algunas Consideraciones




Siempre he pensado que el motivo fundamental de nuestra existencia como seres humanos en este planeta, es llegar a descubrir y realizar una completa y efectiva comunicación con la fuente de nuestros orígenes. Sea que estemos conscientes o no de ello, existen diversos caminos por donde "el destino" a lo largo de nuestra vida se encargará de conducirnos para ayudarnos a alcanzar ese objetivo. En algunos casos es la religión, en otros, el conocimiento místico o esotérico, el que dará origen a este despertar de la conciencia a las cosas del espíritu. No sé como sea ésta realidad para otros pero en lo que a mí respecta me resulta bastante natural considerarme una entidad espiritual, es decir me resulta sencillo creer que después que muera seguiré existiendo en alguna otra dimensión donde prefiero imaginar que todo será hermoso. Sin embargo me ha sucedido encontrarme algunas veces con personas que al tocar este tema muy sueltas de huesos me dicen no estar muy seguras respecto a la existencia de una vida después de esta: "No estoy muy segur@"... me dicen y me dejan fría, porque creo que no podría ni respirar tranquila si considerase que solo soy un objeto más de la Naturaleza que un día se reciclará y basta.

Por qué estoy convencida de lo contrario? como es natural tengo mis propias razones personales que aunque para otros no contengan ningún valor, para mí forman parte de la experiencia intuitiva que le toca realizar a nuestro Ser en su camino hacia la inmortalidad. Tal vez el punto de partida esté como siempre en nuestra primera infancia, en las creencias que recibimos de nuestros padres y que más adelante conforme vamos creciendo unido a nuestra propia experiencia, tomarán fuerza o se debilitarán, convirtiéndose (en este último caso) en un vago recuerdo del que preferimos escapar. No sé a qué se deba que algunas personas sintamos más curiosidad respecto a otras en relación a este tema, quizás sean las circunstancias que nos toca afrontar a cada uno en la vida, las que nos vuelvan de determinada manera, las que consigan que nos volvamos hacia adentro y que tengamos los ojos y los oídos abiertos a cosas que la mayoría no ve, sea como sea estoy convencida que en este punto de nuestra evolución, el género humano se encuentra en una etapa de transición o de transformación del hombre común que ha sido siempre, al hombre más desarrollado y provisto de nuevas facultades que será el hombre del mañana... y esto está sucediendo "silenciosamente" sin que nos demos cuenta, cada vez más a todos.

No hay comentarios: